Elecciones 2014: Uruguay
Per Luciano Napolitano (@luchito_cjs)
El pasado día 30 de noviembre de 2014 se celebraron en la República Oriental del Uruguay la segunda vuelta de los comicios presidenciales donde el partido oficialista del Frente Amplio (FA) encabezado por el ex guerrillero y actual presidente de la nación José Mujica, repitió mandato gracias a los votos obtenidos por la fórmula de Tabaré Vázquez-Raúl Sendic.
El Frente Amplio obtuvo en primera vuelta 1.108.527 (47,21%) votos, el Partido Nacional (NA) encabezado por el abogado de 41 años Luis Lacalle Pou obtuvo 716.527 (30,90%) votos y el Partido Colorado 299.062 (12,73%) de los votos a favor. Con estos números, el partido oficialista consiguió la mayoría en Diputados (50 de 99) y en Senadores (15 de 30 más la figura del vicepresidente).
En la noche del cierre de campaña en el Parque Batlle de la ciudad de Montevideo, el oncólogo de 74 años del FA que repite presidencia (2005-2010) se dirigió a sus simpatizantes con las siguientes palabras: “Desarrollamos un país de inversiones, de trabajo, de política de inclusión social, para luchar contra la pobreza y derrotarla, para disminuir la mortalidad infantil. No lo entienden (los opositores) y se preguntan por qué el Frente Amplio va a lograr un tercer gobierno”.[1]
Desde que la alianza que agrupa a docenas de partidos, entre ellos socialistas, comunistas, socialdemócratas, independientes y ex tupamaros, llegó al poder en 2005 la economía uruguaya creció a un ritmo sostenido acompañada de una clara reducción de la pobreza y el desempleo. Según los datos del Instituto Nacional de Estadística la pobreza rozaba el 40% en 2004 y en la actualidad se ubica por debajo del 10 por ciento. Al mismo tiempo el desempleo que superaba el 20% hace una década, hoy los datos oficiales dicen que se ubica en torno al 6%.
El presidente actual, José “Pepe” Mújica, deja un país con un gran avance en materia de derechos aprobando leyes como la Ley de Matrimonio Igualitario, Ley de la Despenalización del Aborto o la Ley de la Regulación de la Marihuana. El tan entrañable y peculiar presidente de Uruguay dejará la presidencia el próximo año con un 65% de imagen positiva y aprobación de su mandato contra sólo un 17% que están disconformes y lo reprueban.
El historiador y reconocido politólogo uruguayo Gerardo Caetano planteó dos desafíos para el próximo mandato en el cual considera que Tabaré Vázquez deberá basar las energías de su gobierno. El primero se basa en diversificar la matriz productiva del país oriental. Históricamente, la producción estuvo basada en el sector agropecuario, pero hoy en día en Uruguay están creciendo nuevas industrias como la fabricación de madera y papel, la industria química (1,5 del PIB) o la del software. Los sectores más a la izquierda del gobierno rechazan un crecimiento basado en el aumento del precio de las commodities (materias primas) como vino sucediendo en los últimos años y proponen generar mecanismos para incentivar una mayor industrialización y un mayor agregado de tecnología e innovación a las cadenas productivas.
El segundo desafió a destacar del politólogo Caetano es el de transformar la educación y mejorar la cohesión social El gobierno electo, que ya reconoció graves carencias en el sistema educativo del país, propuso aumentar del 4,8% al 6% en los próximos años la inversión en educación y triplicar el porcentaje respecto al PIB dedicado a investigación y ciencia.
Destaca también el politólogo Gerardo Caetano que no menos importante será la participación de Uruguay en los procesos de integración con la región. La primera dama saliente y senadora reelecta Lucía Topolansky resaltó el papel de los gobiernos progresistas de América Latina y propuso seguir profundizando en el Mercosur, Unasur, Celac o el Banco del Sur ya que comprende que en un mundo que se mueve por bloques, es muy importante que América del Sur tenga uno fuerte y consolidado. Pero la mejor definición de lo que está pasando en Latinoamérica la da el escritor y activista Frei Betto: “Ahora la gente elige presidentes con cara de gente”. En este contexto, surgieron liderazgos como el de Lula o Dilma en Brasil, Hugo Chavez en Venezuela, Nestor Kirchner y Cristina Fernandez de Kirchner en Argentina o Rafael Correa en Ecuador. Dicho proceso de transformación iniciado por la izquierda latinoamericana hace ya más de una década en algunos casos, y sus continuas renovaciones de mandatos hizo que la derecha neoliberal venga retrocediendo perdiendo fuerza en toda la región.
Si bien es cierto que en Uruguay y en toda latinoamerica todavía quedan muchas cosas por cambiar y por mejorar, es indiscutible el vuelco que ha dado la región en los últimos años. Ahora el continente puede mirar al futuro y ver países punteros económicamente que compiten a la par con las economías más desarrolladas del mundo, ver países que respetan los derechos humanos y castigan a sus represores, países que reconocen derechos básicos del ser humano como las leyes de 8 horas para la jornada laboral del peón rural o la ley de identidad de género (o identidad transexual), ver países que apuestan por la educación y la ciencia como es el caso de Argentina y el satélite ARSAT-1 enviado al espacio hace escaso 1 mes atrás, o ver países que defiendan los intereses general de todos sus ciudadanos en los foros más importantes del mundo y no el de unos pocos o el de algunas empresas privadas.
Los desafíos que afronta ahora el Frente Amplio y su presidente electo no difieren del resto de países de la región en los cuales en los próximos años se intentará profundizar en la igualdad social, en el bienestar de los ciudadanos, en el crecimiento sostenido y en la transformación productiva, siempre con el objetivo final de buscar una región y unos países más justos e igualitarios para todos sus habitantes.
[1] Diario Pagina12. Viernes 28 de noviembre de 2014. Clima de fiesta en el cierre del Frente Amplio. Mercedes Lopez San Miguel.